Las empresas de negocios han cambiado sus prioridades en los últimos años. Actualmente, los responsables de muchas grandes compañías se han dado cuenta de que su talón de Aquiles es la seguridad.
Cada vez más, se solicitan los servicios de empresas especializadas en el sector de la seguridad digital, convirtiéndose en un nuevo nicho de mercado focalizado en las grandes compañías y multinacionales afincadas en nuestro país.
Los mayores problemas de seguridad en un negocio son los relacionados con el mundo informático y las ciber amenazas. De hecho, más del 60% de las empresas consideran que la seguridad TI y de los sistemas de información son dos de los principales riesgos a los que se enfrentan. Este ámbito se ha convertido en un reto a superar, especialmente desde que la gestión de los negocios se ha virtualizado.
Por otro lado, según se recoge en una encuesta realizada por Kaspersky Lab, empresa de control y seguridad, casi la mitad de los responsables de las grandes empresas consideran que debe prestarse especial atención a los problemas de seguridad derivados de la creciente movilidad de sus empleados, un hábito de trabajo que cada vez se generaliza más.
También se contrata a las empresas de seguridad para controlar las consecuencias que pueden tener en una compañía las políticas de consumerización y el “bring your own device”, que permiten el acceso a datos corporativos por parte de sus empleados.
Un ejemplo de la precariedad en la que se encuentran las empresas españolas frente a la seguridad, es el empleo de algo tan sencillo y habitual como los antivirus.
Estos datos significativos muestran la necesidad existente de un servicio completo que sea de calidad y eficiente, que abarque además hechos tan complejos como el control y acceso de extraños en el edificio, los posibles robos de datos y las amenazas de hackers que puedan entrar en los programas propios de las empresas.