Hoy día la implantación de la Seguridad Medioambiental en cualquier tipo de actividad, y junto a las buenas prácticas tanto en la calidad del producto o el empleo de un sistema de protección de riesgos laborales, son los tres pilares fundamentales que todo empresario o gestor de actividad, ya sea ésta pública o privada, debe tener presente a la hora de fortalecer y preservar su trabajo.
La empresa Sgi-Seguris, con más de treinta años de experiencia en el sector de la Seguridad, sabedora de la importancia que ha adquirido el sector dedicado a la Protección Ambiental y los avances tecnológicos realizados en esta línea y en donde después de realizar una labor de búsqueda de profesionales del sector de la Seguridad Medioambiental, decide incorporar a su línea de trabajo, el nuevo Gabinete de Seguridad Medioambiental.
La idea es ayudar al empresario o gestor de una actividad a entender del porqué es necesario implantar una serie de medidas encaminadas a la protección tanto de los trabajadores, la propia actividad y el medio ambiente.
El asesoramiento medioambiental ofrece la posibilidad de un estudio detallado de la actividad, para encontrar los posibles puntos débiles que una actividad pueda tener y en donde a través de estos, llamémoslos puntos calientes, se puedan manifestar situaciones no deseadas. Estas situaciones pueden ser: accidentes, incidentes tanto por la propia actividad, como del personal, por actos de sabotaje, de actos vandálicos, o por intrusiones para realizar posibles hechos ilícitos.
Como podemos apreciar, son varios los riesgos que puede sufrir una actividad. Si estos riesgos no son contemplados y gestionados con anterioridad a su posible aparición (ya sean de forma accidental, por incidente, o por situación no deseada) con resultado de daños a personas, los originados a la propia actividad o al medio ambiente, supondrán, además de un daño a la imagen o prestigio de la empresa, el desembolso de una importante suma de capital, ya sea para restituir los daños ocasionados a las personas, daños a la propia actividad y colindantes, y los daños causados tanto a los servicios municipales o la posible contaminación ambiental.
Por lo tanto, es necesario pensar en la probabilidad de que actos contrarios a una actividad tarde o temprano puedan manifestarse, por lo que se recomienda contemplar la posibilidad de solicitar un estudio integral de protección ambiental.
Imagen: Sgi-Seguris